Definitivamente existe una gran diferencia entre la oración y el rezo especialmente para la relación que debemos mantener con nuestro Dios.

Etimológicamente la palabra rezar viene le latín recitare que también nos da el cultismo recitar.

Recitare en principio es leer en voz alta, especialmente también leer un listado.

En concreto en lenguaje jurídico es leer ante un tribunal la lista de las personas convocadas ante él.

Con el tiempo adoptó vulgarmente cierto valor de decir en voz alta (normalmente repitiendo algo leído o memorizado).

Este verbo lleva un prefijo re- de reiteración sobre el verbo citare (citar, poner en movimiento nombrando a alguien), frecuentativo de ciere (poner en movimiento, hacer venir con una llamada).

Aunque rezar se usa para referirse a recitar oraciones religiosas, todavía tenemos el significado general de decir:

«Un refrán que reza…» o «un libro que reza…»

Esto en referencia a cosas escritas o asertos acuñados que se repiten en expresiones.

En relación con esta raíz también conservamos los vocablos de origen latino citar, excitar, solicitar, incitar, solícito, concitar o suscitar. (http://etimologias.dechile.net/?rezar)

Rezar solo significa recitar

Como hemos leído la palabra rezar significa recitar, es decir repetir lo que ya está escrito, repetir algunas frases, repetir palabras.

En el sentido religioso, repetir hasta el cansancio oraciones de alto valor, pero porque simplemente lo hemos repetido se vuelven vacías.

Hemos escuchado aquella frase de una religión que dice: “recemos el rosario”, donde reiteradamente nombras frases y palabras, inventadas por el hombre claro está, y que, además, se vuelve como una grabadora sin ton ni son.

Lo mismo esa otra frase costumbrista “recemos la novena”, actividad igualmente inventada por el hombre.

Asimismo se repite cada año lo mismo en relación al supuesto nacimiento de Jesús, cuyo contenido ya hemos estudiado, Él no nació un 25 de diciembre.

Cuando “rezas” el Padre Nuestro sin sentido, es porque precisamente has rezado esta oración.

Es decir repites de memoria sin entender lo que dices, porque eso nos han enseñado.

Te invito a que comprendas lo que realmente quiere decir esta poderosa oración compartida por nuestro Maestro Jesús. Revísalo en este enlace: «Cómo pedir a Dios a través de una oración correcta»

La oración es diferente a rezar

Entre tanto la oración es muy diferente a rezar.

Etimológicamente la palabra orar viene del latín orare que significa (hablar, hablar públicamente o en voz alta, expresarse, también rogar, solicitar, dar un discurso)

De este verbo latino nos llega también:

• Adorar, es decir rendir culto a Dios, formada de ad- (hacia) y orare.
• Adorable: Que se puede (-able) adorar.
• Adorador: El que (-dor) adora.
• Adoración: Acción y efecto (-ción) de adorar
• Oración: Parte de un discurso, acción del habla- También plegaria, acción y efecto (-ción) de orar.

(http://etimologias.dechile.net/?orar)

Como te podrás dar cuenta hay una enorme diferencia entre rezar y orar.

Cuando rezamos solo repetimos, cuando oramos estamos entablando una conversación con Dios.

Al dialogar con nuestro amado Jesús, le podemos solicitar, clamar, rogar, agradecer, expresarle nuestro sentir, decirle que lo amamos.

Al orar con Dios, podemos mencionarle que estamos arrepentidos por desobedecerlo, manifestarle lo especial que es en nuestras vidas.

Podemos clamar de corazón que nos libre de todo mal y que nos de sabiduría.

Que nos llene de fortaleza y misericordia para enfrentar todas las situaciones de nuestra vida.

Por ello, la oración es poder, en cambio rezar es repetir frases que se vuelven vacías de tanto repetir.

El orar es una conexión directa con Dios, el rezar es repetir de memoria sin entender el significado.

La oración es una plena confianza y relación con Dios.

Romanos 12:12

12 Alégrense en la esperanza, muestren paciencia en el sufrimiento, perseveren en la oración.

De allí que te hemos mencionado en varias ocasiones que no se trata de cambiarte de religión, sino de buscar a Dios, conocer a Jesús.

Es muy importante saber lo que Dios quiere para nuestras vidas.

Es indispensable tener una relación Padre e hijo, una relación de amistad, de respeto, de obediencia, de hacer la Voluntad de nuestro Creador en todo momento

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Cuán maravilloso es sentir su presencia a cada instante, de saber que siempre estará a tu lado, pase lo que pase.

Recuerda esto: Los musulmanes rezan, los budistas rezan, los mormones rezan, los judíos rezan, los hindúes rezan, en fin, generalmente los religiosos rezan.

Pero los verdaderos cristianos oramos, es decir nos conectamos con Dios para elevar nuestras oraciones solo a Él y pedirle misericordia por nuestras vidas mientras estamos en la tierra.

Si eres un verdadero creyente en Jesucristo, debes comprender que la oración es el único mecanismo de contacto con el Dios verdadero.

Debemos aprender a orar, a pedir, a suplicar, a adorar, a alabar, a agradecer, a darle la Honra y la Gloria solo a Él, no a santos inventados, no a vírgenes, no a papas, no a hombres.