¿Sabes qué significa hasta 70 veces 7?
Es duro y decepcionante cuando un amigo o amiga a quien le has brindado toda su confianza, cuando menos lo piensas te traiciona, ya sea negando la amistad, no pagándote una deuda, olvidando los momentos valiosos que pasaron juntos, alejándose de ti cuando has tomado la decisión de seguir a Jesús y en fin.
Pero no solo pasa este tipo de cosas en el plano de la amistad, también suele suceder al interior de la propia familia, asimismo el dinero y ciertos factores determinan el rompimiento de las relaciones.
En tu sitio de trabajo quizá te pasó algo similar con un compañero o con tus inmediatos superiores o de pronto con tu propio jefe, quien no supo valorar lo que haces y te rechazó o te hizo quedar mal delante de todos.
O los típicos chismes entre compañeros o compañeras, en fin.
Luego de estos acontecimientos te sientes frustrado, la pena te embarga, los sentimientos son encontrados, la ira te invade y el odio está a punto de recorrer todo tu cuerpo, en casi todos los casos finalmente lo logra y comienzas a rechazar a esa persona que te hizo daño.
Mira que este tipo de daño es común en nuestros días, sin embargo no es el peor.
Imagínate (Dios no quiera) que alguien le haga daño a tu hijo o a tu hija, que abusen de ella, o que le suceda algo mucho más terrible.
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Cómo te sentirías, cómo reaccionarías, y ¡cómo se sentiría ella o él! O si te pasa a ti mismo. Difícil situación ¿verdad?
El coraje es mucho peor en estos casos, los sentimientos de venganza están a punto de desbordarse y en muchos de los casos terminan en verdaderas tragedias.
Solo hay una manera de combatir estos sentimientos encontrados, existe una sola forma de luchar contra el odio, un solo modo de enfrentar la venganza y detenerla a tiempo: El Perdón.
Pero no un perdón de dientes para afuera, no un perdón y “nunca más te dirigiré la palabra en mi vida”, no un perdón de palabra y por dentro sigo quemándome con las llamas del odio.
Sino un perdón que lo aprendemos solo de la sabiduría de Jesucristo.
Cuando aprendemos a perdonar de corazón, nos quitamos las cadenas del odio, nos quitamos los grilletes de la venganza, nos quitamos las ataduras del rencor, somos verdaderamente libres y podemos continuar en nuestras vidas sin ningún peso que nos impida seguir perdonando a quienes nos ofenden hasta 70 veces 7.
¿Sabes qué significa hasta 70 veces 7?
Esto no quiere decir que solo tienes que elevarlo a la potencia y ya, esto significa perdonar las veces que sean necesarias, porque la única persona que se libera de toda culpa eres tú mismo, la única persona beneficiada eres tú.
Sí, lo sé, es difícil perdonar, pero no imposible, Jesús te ayuda en este proceso, aprende de Él, busca de Él, no pierdas la oportunidad de conocerlo y confiar en Él.
Perdonar también te abre las puertas para que Dios te escuche.
Finalmente cuando aprendes a confiar en Él, las cosas malas ya no te suceden. Cuando aprendes a orar todos los días por protección para los tuyos y de ti, toda la maldad se aleja. Créeme.
La Fe es la clave para que la oración sea efectiva, sin embargo la falta de perdón es una barrera inmensa que impedirá que la oración llegue a Dios.
Mateo 18:21-22
21 Entonces se le acercó Pedro y le dijo: Señor, ¿cuántas veces perdonaré a mi hermano que peque contra mí? ¿Hasta siete? 22 Jesús le dijo: No te digo hasta siete, sino aun hasta setenta veces siete.
El perdón no es una opción, es una decisión que solo depende de ti. Jesús te ayuda cuando lo conoces, pero si solo vives una religión donde no te han enseñado profundamente sobre Dios, difícilmente podrás aprender lo que significa Jesús en nuestras vidas y menos aún a perdonar.
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Con todo lo que hemos hecho en nuestras vidas, todos los errores que hemos cometido, todos los insultos que hemos proferido, las mentiras que hemos dicho, el daño que hemos hecho ¿merecemos el perdón? Jamás…
Pero Jesús nos ha perdonado, Jesús entregó su vida por nosotros, aún siendo pecadores, a Él no le importó, se entregó, te perdonó y eres salvo.
Entonces ¿Quiénes somos nosotros para decidir no perdonar? Aún si consideramos que la otra personas nos haya hecho el más terrible de los daños.
Con el perdón te liberas, con el perdón te sentirás mucho mejor… Perdonando hasta 70 veces 7, es como debemos vivir.