Jesús es mi Pana
El hecho de morir por alguien más no es una decisión fácil y más aún si es una persona que no es de nuestro agrado, tal vez lo haríamos por un ser querido, por nuestro hijo, hermano, padre o nieto. ¿Y morir por Jesús?
¿Te has hecho esta pregunta alguna vez? ¿Morirías por Jesús? ¿Permitirías que maten a tus hijos por Jesús? Difícil determinación ¿verdad?
Pero existe mucha gente que desde que conoció a Jesús en persona y hasta nuestros días que lo conocemos a través de las Escrituras, están dispuestas a dar su vida por la Verdad, por defender el verdadero mensaje, por testimoniar que Jesús es Dios y que nadie puede ir en contra de esta realidad.
Precisamente Jesús nos advirtió que amarle y seguirle nos costaría inclusive la vida.
Mateo 10:16-17 / 21-22
16 He aquí, yo os envío como a ovejas en medio de lobos; sed, pues, prudentes como serpientes, y sencillos como palomas
17 Y guardaos de los hombres, porque os entregarán a los concilios, y en sus sinagogas os azotarán;
21 El hermano entregará a la muerte al hermano, y el padre al hijo; y los hijos se levantarán contra los padres, y los harán morir.
22 Y seréis aborrecidos de todos por causa de mi nombre; mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo.
Morir por Jesús es la séptima profecía que se ha cumplido y se sigue cumpliendo; el odio y desprecio a los cristianos y entre nosotros, se acrecienta cada día más, solo miremos lo que pasa en Medio Oriente.
Mateo 24:9-10
9 Entonces os entregarán a tribulación, y os matarán, y seréis aborrecidos de todas las gentes por causa de mi nombre.
10 Muchos tropezarán entonces, y se entregarán unos a otros, y unos a otros se aborrecerán.
15 Mártires del Cristianismo
Recordemos las muertes de los primeros cristianos. Nadie creería cómo fueron triturados, torturados, azotados y finalmente asesinados. Las Escrituras recogen estos hechos históricos nefastos para la humanidad, además de otras fuentes históricas.
Esteban murió apedreado.
Hechos 7:59-60
59 Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu.
60 Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió.
Jacobo murió decapitado por una espada
Hechos 12:1-2
59 En aquel mismo tiempo el rey Herodes echó mano a algunos de la iglesia para maltratarles.
60 Y mató a espada a Jacobo, hermano de Juan.
Mateo murió atravesado por una espada
Previo a su muerte Mateo sufrió martirio en Etiopía.
Santiago fue golpeado, apedreado y reventado la cabeza luego de que fue lanzado desde una altura de 30 metros
Santiago fue arrojado de una altura de más de 30 metros desde el pináculo sureste del templo, cuando se rehusó a negar su fe en Cristo. Cuando descubrieron que sobrevivió a la caída, sus enemigos lo golpearon con un garrote en la cabeza hasta matarlo. Este fue el mismo pináculo donde Satanás había llevado a Jesús durante la tentación.
Matías fue apedreado y luego decapitado
El escogido para tomar el lugar de JUDAS fue apedreado en Jerusalén y después decapitado.
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Andrés murió crucificado en una cruz
Andrés fue crucificado en una cruz en forma de “X” en Grecia. Después de haber sido azotado severamente por siete soldados, ellos ataron su cuerpo a la cruz con cuerdas para prolongar su agonía.
Marcos murió arrastrado por una turbada multitud
Los Hechos de Marcos, un escrito de mitad del siglo IV, refieren que Marcos fue arrastrado por las calles de Alejandría, atado con cuerdas al cuello. Después lo llevaron a la cárcel y al día siguiente le volvieron a aplicar el mismo martirio hasta que falleció.
Pedro crucificado boca abajo
Se dice que el apóstol Pedro fue crucificado en Roma y con la cabeza hacia abajo. Una de las fuentes de esta historia, es un texto llamado Los Hechos de Pedro, un texto probablemente escrito en griego no después del año 200 despues de Cristo por un residente de Asia Menor.
Pablo fue decapitado en Roma
Pablo, fue apresado en Jerusalén y también en Roma. Tertuliano describe que Pablo sufrió una muerte similar a la de Juan el Bautista, quien fue decapitado.
Bartolomé fue degollado
Su martirio y muerte se atribuyen a Astiages, rey de Armenia y hermano del rey Polimio a quien San Bartolomé había convertido al cristianismo. Como los sacerdotes de los templos paganos, que se estaban quedando sin seguidores, protestaron ante Astiages de la labor evangelizadora de Bartolomé, Astiages mandó llamarlo y le ordenó que adorara a sus ídolos, tal como había hecho con su hermano. Ante la negativa de Bartolomé, el rey ordenó que fuera desollado vivo en su presencia hasta que renunciase a su Dios o muriese. (Wikipedia)
Tomás muerto a punta de lanza
El apóstol Tomás fue traspasado con una lanza en la India, durante uno de sus viajes misioneros para establecer ahí una iglesia.
Lucas murió ahorcado
Lucas fue médico en Macedonia y fue colgado en un olivo por los sacerdotes idólatras de Grecia
Simón crucificado
Los cristianos de Etiopía dicen que fue crucificado en Samaria. Justo Lipsio escribió que fue cortado por la mitad en Suanir, Persia. No obstante, Moisés de Corene escribió que fue martirizado en Weriosphora, en el reino de Iberia del Cáucaso.
Otra tradición dice que visitó la Britania romana (posiblemente Glastonbury) y que fue martirizado en Caistor, el actual Lincolnshire. Algunos autores dudan sobre si su epíteto «el Zelote» significa que estuvo involucrado en los grupos judíos contra el Imperio romano, que fueron exterminados.
Juan martirizado en aceite hirviendo
Juan enfrentó el martirio cuando fue hervido en un enorme caldero de aceite durante una ola de persecución en Roma. Sin embargo, fue librado milagrosamente de la muerte.
Fue sentenciado a las minas en la prisión de la isla de Patmos y fue ahí donde escribió el libro profético “Apocalipsis”. Después fue liberado y regresó a lo que hoy conocemos como Turquía. Juan murió de viejo y fue el único de los apóstoles que falleció de muerte natural. (Tiempo.hn)
Bernabé fue lapidado
Escritos apócrifos hablan de un viaje a Roma y de su martirio,5 hacia el año 70, en Salamina, por mano de los judíos de la diáspora, que lo lapidaron.
Pero también hubo mártires que murieron torturados, quemados o destrozados por fieras en el «famoso» Coliseo Romano.
El odio sigue creciendo en contra de los cristianos.
Mateo 5:10-12
10 Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos.
11 Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo.
12 Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos; porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros.
Pese a estas situaciones adversas, ahora más que nunca debemos perseverar y persistir en amar, obedecer, servir y temer a Dios.
Filipenses 3:12-14
12 No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto; sino que prosigo, por ver si logro asir aquello para lo cual fui también asido por Cristo Jesús.
13Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante,
14 prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús.
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Con información de Pastor Arturo Norero de Casa de Oración Dile a Un Amigo.
