Dios es muy claro en sus afirmaciones y sentencia las cosas que aborrece, pero lamentablemente son parte de nuestra vida cotidiana: ojos altivos, lengua mentirosa, manos derramadoras de sangre, el corazón envenenado, los pies que corren hacia el mal, el testigo falso y mentiroso y el que siembra discordia entre hermanos.
Ciertamente el pecado tiene sus consecuencias, al hacer todas estas cosas que hemos nombrado estamos pecando y al pecar, estoy completamente seguro que siempre habrá situaciones que lamentar.
No todos quieren hablar de estas cosas que aborrece Jehová, porque no les conviene, pero es necesario insistir para que todos corrijamos nuestras faltas. Quizá también caemos en este círculo vicioso por desconocimiento o por costumbre y creemos que no hay problema.
Pero sí que hay un grave inconveniente cuando desobedecemos a Dios, por ello recordemos:
Seis cosas aborrece Jehová, Y aun siete abomina su alma
Proverbios 6:16-19
16 Seis cosas aborrece Jehová,
Y aun siete abomina su alma:17 Los ojos altivos, la lengua mentirosa,
Las manos derramadoras de sangre inocente,18 El corazón que maquina pensamientos inicuos,
Los pies presurosos para correr al mal,19 El testigo falso que habla mentiras,
Y el que siembra discordia entre hermanos.
1. Los ojos altivos
Una mirada lo dice todo. Cuando miras a alguien con desprecio transmites ese odio, esa altivez. Esta soberbia demuestra que tu corazón está vacío de amor, de compasión, de solidaridad, de perdón y estas cosas amigo mío, son pecado. Si reflejas orgullo a través de tus ojos, estás siendo altivo.
Proverbios 21:4
Altivez de ojos, y orgullo de corazón,
Y pensamiento de impíos, son pecado.
2. Lengua mentirosa
La lengua es uno de los instrumentos que puede llegar a ser mortal si se utiliza de mala manera. Es como un cuchillo: en manos de una persona con buenas intenciones, lo utilizará para hacer una cena deliciosa por ejemplo, pero en manos de alguien perverso, llegará a matar. Así es la lengua, aunque no lo creas.
De una mentira o imprudencia comenzaron guerras, por ello cuida tu lengua, jamás hables mentiras, porque esto aborrece nuestro Creador.
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Proverbios 11:9
El hipócrita con la boca daña a su prójimo;
Mas los justos son librados con la sabiduría.
El padre de todas las mentiras es el mismo diablo, todos los que practican el pecado de la mentira están reflejando ser hijos del demonio.
Juan 8:44
Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. El ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira.
Lamentablemente los mentirosos no heredarán el Reino de los Cielos, nuestro Señor Jesucristo lo advirtió:
Apocalipsis 21:8
Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda.
3. Las manos derramadoras de sangre inocente
La sociedad actual vive una ola de asesinatos, muertes, sacrificios inocentes y demás abominaciones que son lógicamente aborrecidas por Dios, por ello Jesús te advierte que te apartes de toda clase de maldad.
Salmos 37:27
Apártate del mal, y haz el bien,
Y vivirás para siempre.
Jesús en su infinito amor te pide arrepentimiento verdadero, si has cometido una serie de barbaridades, aún estás a tiempo para arrodillarte ante el Creador y entregarle su vida para tu salvación:
Santiago 4:8
Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad las manos; y vosotros los de doble ánimo, purificad vuestros corazones.
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4. El corazón que maquina pensamiento inicuos
Inicuo quiere decir que no tiene justicia, que no guarda equidad en sus acciones. El corazón endurecido y que siempre quiere dañar a los demás, es el que no soporta nuestro Dios.
Se la pasa pensando en cómo hacer daño a los demás o en cómo perjudicar para obtener beneficios propios. Aquel que no tiene una pizca de generosidad.
La naturaleza corrompida por el pecado produce millones de pensamientos de maldad en los corazones que diariamente son llevados a la acción.
Marcos 7:21
Porque de dentro, del corazón de los hombres, salen los malos pensamientos, los adulterios, las fornicaciones, los homicidios
El profeta Isaías lo advirtió y concatena 3 de las cosas que aborrece Jehová:
Isaías 59:7
Sus pies corren al mal, se apresuran para derramar la sangre inocente; sus pensamientos, pensamientos de iniquidad; destrucción y quebrantamiento hay en sus caminos.
5. Los pies presurosos corren al mal
Es altamente sorprendente saber que existen personas que disfrutan haciendo maldades y corren literalmente para emprender en una acción que perjudique a los demás. Cuando son llamados a sobornar o recibir sobornos, cuando son llamados a obtener un dinero mal habido, cuando son llamados a trocar programas informáticos para obtener algún beneficio lesionando a otros, están listos para cometer estos actos.
Sin embargo, cuando a estas «mentes brillantes» se les pide hacer el bien, lo piensan una y otra vez.
Cuídate de no caer en esta tentación, Dios la aborrece. Por ello:
Marcos 9:45
Y si tu pie te fuere ocasión de caer, córtalo; mejor te es entrar a la vida cojo, que teniendo dos pies ser echado en el infierno, al fuego que no puede ser apagado
6. El testigo falso que habla mentiras
Ya lo habíamos dicho, la mentira es la peor de las acciones, porque puede derivar en consecuencias nefastas. Si aún más, como testigos de algo, tergiversamos la versión y hablamos mentiras, estamos convirtiéndonos en seres abominables a los ojos de Dios.
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Solo imagínate el hecho de alterar las Escrituras, esto es un acto irreverente que difícilmente podría ser perdonado. ¿Qué podría suceder con quienes han distorcionado la Palabra de Dios a lo largo de la historia creando falsas religiones? No quiero ni imaginarme.
Deuteronomio 4:2
No añadiréis a la palabra que yo os mando, ni disminuiréis de ella, para que guardéis los mandamientos de Jehová vuestro Dios que yo os ordeno.
Nunca testifiques lo que no es:
Apocalipsis 22:18-19
Yo testifico a todo aquel que oye las palabras de la profecía de este libro: Si alguno añadiere a estas cosas, Dios traerá sobre él las plagas que están escritas en este libro.
Y si alguno quitare de las palabras del libro de esta profecía, Dios quitará su parte del libro de la vida, y de la santa ciudad y de las cosas que están escritas en este libro.
7. El que siembra discordia entre hermanos
Otra de las cosas que no solo aborrece Jehová sino que abomina es el hecho de sembrar discordia entre hermanos, no estamos hablando solo de hermanos de sangre, sino también entre amigos, compañeros, hermanos en Cristo.
Parece mentira que existen personas que se dedican a esta labor, es dejaron que el diablo triunfe sobre ellos y andan hablando mal de su hermano, sembrando discrepancias e incluso odio. Esta gente solo tiene amargura y celos en su corazón, y, no se siente satisfecha mientras no observe a los demás que empiezan una riña o una desavenencia.
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Si eres así, ten mucho cuidado, arrepiéntete y cambia, porque el castigo puede ser fatal.
Santiago 3:14-16
Pero si tenéis celos amargos y contención en vuestro corazón, no os jactéis, ni mintáis contra la verdad;
porque esta sabiduría no es la que desciende de lo alto, sino terrenal, animal, diabólica.
Porque donde hay celos y contención, allí hay perturbación y toda obra perversa.
Estas son las seis cosas que aborrece Jehová y aun siete abomina. Es necesario que para lograr un cambio en tu actitud, si estás cayendo en cualquiera de estos pecados, reconozcas que eres un pecador, un arrepentimiento sincero y humillarte de corazón ante el Creador. Sentirás un cambio real, verdadero y vivificante que te beneficiará en gran medida.