¿Aún no aceptas a Jesús como tu Salvador?
El aceptar a Jesucristo como Salvador es muy importante para nuestra vida; Él siendo rey bajó a la tierra y dio su vida por nosotros, por nuestros pecados y lo único que nos pide es que lo dejemos entrar en nuestro corazón y confiemos en lo que hará.
Juan 1:14
14 Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad.
Jesús tomó nuestro lugar en la cruz pagando enteramente por nuestras transgresiones y con su resurrección se convierte en nuestro único Salvador:
Isaías 53:4-5
4 Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido.
5 Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados.
Hay muchas personas en este tiempo que no creen en Dios, pues sus ojos ven solo lo humano, sus ojos y oídos espirituales los tienen cerrados y se resisten oír de nuestro Amado Salvador. Generalmente para estas personas la creación es producto de una evolución, sin embargo la pregunta es: “¿si nosotros somos descendientes del mono, por qué los monos ya no siguen evolucionando en humanos? (OJO, hay muchas respuestas en el internet sobre esto, ninguna convincente y todas confusas; finalmente siguen siendo teorías).
Si fuésemos productos de los monos deberíamos estar tristes pues dicho animal no tiene ningún propósito en su vida, pero gracias a Dios no es así, la Palabra nos dice que fuimos creados a imagen y semejanza de nuestro Dios
Génesis 1:26
26 Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra.
Y como no estar agradecidos con Él, si nos dio la vida y vida en abundanciaJuan 10:25-28
25 Jesús les respondió: Os lo he dicho, y no creéis; las obras que yo hago en nombre de mi Padre, ellas dan testimonio de mí;
26 pero vosotros no creéis, porque no sois de mis ovejas, como os he dicho.
27 Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen,
28 y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano.
Cómo dice la canción:
Como no creer en Dios
Si lo siento en mi pecho a cada instante
En la risa de un niño por la calle
O en la tierna caricia de una madre
Cuando aceptamos a Cristo en nuestro corazón, nuestra vida toma otro sentido, pues vivimos para glorificarle, para adorarle, para que nuestra vida refleje su amor. Si bien es cierto los problemas no terminan, pero en cada paso que damos está nuestro Señor dándonos las fuerzas, y la sabiduría, solo necesitamos abrir nuestros oídos espirituales para escucharlo.
Ser cristiano es tener una relación personal con el Señor Jesús, no con la religión y poner nuestra fe y confianza en Aquel que dio su vida por cada uno de nosotros.
Te interesa: Jesús no es una religión sino una relación responsable para salvar tu alma
Si aún no aceptas a Jesús puedes hacerlo ahora, diciendo la siguiente oración:
“Gracias mi Amado Señor porque tomaste mi lugar en esa Cruz, gracias mi Eterno Salvador porque diste luz a mi vida, gracias mi Fiel Amigo Jesús porque nunca me dejas solo, gracias por ser mi Doctor, mi psicólogo, porque cuando leemos tu Palabra y tus promesas, las hago mías y por ello sé que estoy protegido. Te amo Jesús, Te amo. Perdona mis transgresiones, entra en mi corazón y reina en él, te acepto como mi Señor y Salvador para que manejes mi vida y te agradezco por tu maravillosa gracia y perdón. En el Nombre de Cristo Jesús, amén, amén».