El 7 de octubre de 2023, el grupo Hamás, catalogado como terrorista, perpetró un ataque armado sin precedentes contra Israel, dejando más de 1200 muertos, incluidos niños.
Desde allí, comenzó una nueva guerra que no ha parado y que hasta el momento dejan al menos unas 60.000 personas fallecidas entre civiles, soldados y terroristas, según datos de la BBC.
Pero ¿por qué se instaura este conflicto en medio oriente? ¿Por qué Israel, llega a ser tan odiado por sus vecinos? ¿Por qué Hamás y Hezbolá quieren destruir Israel?
Qué es Hezbolá
Hezbolá es una organización musulmana que profesa la rama chií del islam, reconocido como grupo terrorista.
También conocido como ‘Partido de Alá’, apareció en Líbano como una escisión del grupo armado Harakat Amal durante la guerra civil libanesa.
Hezbolá es un proyecto político religioso para Líbano financiado por Irán y es uno de los organismos más hostiles contra el sionismo en la región de Oriente Medio.
“…nuestra lucha terminará sólo cuando esta entidad deje de existir. No reconocemos ningún tratado con Israel, no cesará el fuego ni existirá ningún acuerdo de paz, ya sea por separado o multilateral”,
Señala Hezbolá como parte de un manifiesto de 1985.
Fuente: Diario AS
¿Pero cuál es la causa de este odio? ¿Es territorial solamente? ¿Es político? ¿Es religioso? ¿O hay algo más?
¿Qué es Hamás?
Hamás, acrónimo en árabe de Movimiento de Resistencia Islámica, es otro grupo reconocido como terrorista y organización política armada que está a la cabeza de la Franja de Gaza desde el 2007.
Están asociados al yihadismo de la Hermandad Musulmana.
Poseen una ideología antioccidental, antihegemónica y antiestadounidense que los asemeja más a organizaciones terroristas como Al-Qaeda o a parias internacionales como el régimen fundamentalista de Irán (benefactor económico de Hamás y de Hezbolá) que, a su contrapartida palestina secular, la Organización para la Liberación de Palestina OLP.
A diferencia de la Autoridad Nacional Palestina ANP y la OLP, el grupo terrorista se opuso a los Acuerdos de Oslo y a la existencia del Estado de Israel.
Tal es la división entre la ANP y la OLP con Hamás, que Mahmud Abás, actual líder de la ANP y la OLP, ha apoyado en el pasado a Israel contra Hamás en reiteradas ocasiones.
Hamás opera impunemente desde Gaza, sin que el gobierno de Abás pueda controlarlo.
Utiliza a Gaza como base de operaciones desde donde ataca a Israel y se escuda detrás de civiles ante los bombardeos israelíes.
Fuente: Diálogo Político
¿Cuál es la causa de este odio? ¿Es territorial solamente? ¿Es político? ¿Es religioso? ¿O hay algo más?
Contexto espiritual del conflicto árabe-israelí
Para quienes no tengan claro, la Biblia no solo es un libro espiritual, sino un documento histórico que a lo largo del tiempo se ha comprobado su veracidad.
Para tratar de entender por qué surge este odio hacia Israel y la motivación por exterminarlo, es necesario que lo veamos desde el contexto espiritual y especialmente desde el ámbito religioso.
Si bien es cierto Dios no instauró, ni ordenó la creación de religiones, por el mismo hecho de que los líderes religiosos solo imponen dogmas y no la voluntad de Dios, no es menos cierto que si hablamos de religión como una reunión o agrupación (de acuerdo con su etimología) podría ser valedero el término religión, siempre y cuando su doctrina se trate exclusivamente sobre Dios.
Ahora, es importante destacar cómo se divide la ciudadanía en cuanto a creencias religiosas en Israel.
Según datos de la Embajada de Israel en Chile, hay un 80% de judíos, un 15% de musulmanes, un 2% de cristianos y un 3% de otras minorías.
Es necesario destacar que no todas las personas que habitan en los países árabes son musulmanes, pero la creencia es importante, porque de allí nacen las diferencias.
Las enseñanzas de la Torah, que corresponde a los cinco primeros libros de la Biblia, conocido como pentateuco, tiene explicaciones para el conflicto, derivado de los descendientes de Abraham. Los hijos del patriarca son Ismael e Isaac.
Por tanto, conozcamos que los descendientes de Ismael son los árabes, descendientes de la servidora egipcia de Abraham (Génesis 16:1-6).
11 Además le dijo el ángel de Jehová: He aquí que has concebido, y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre Ismael, porque Jehová ha oído tu aflicción. 12 Y él será hombre fiero; su mano será contra todos, y la mano de todos contra él, y delante de todos sus hermanos habitará. Génesis 16:11-12
La promesa de la Gran Nación a Ismael
20 Y en cuanto a Ismael, también te he oído; he aquí que le bendeciré, y le haré fructificar y multiplicar mucho en gran manera; doce príncipes engendrará, y haré de él una gran nación. (Génesis 17:20)
Cuando Dios promete, lo cumple:
Los países árabes ahora son una gran nación conformada por Arabia Saudita, Argelia, Bahréin, Catar, Chad, Comoras, Egipto, Emiratos Árabes Unidos, Irak, Jordania, Kuwait, Líbano, Libia, Marruecos, Mauritania, Omán, Siria, Somalia, Sudán, Yemen, Yibuti y Túnez.
Son países con riquezas y en su mayoría son temidos por su fortaleza.
Aproximadamente en el año 610, muchos árabes se convertirían en musulmanes y se recogerían las memorias de Mahoma en el Corán, el libro del Islam.
La Tierra Prometida y la descendencia como las estrellas
Los descendientes de Isaac son los judíos. Isaac sería el poseedor de las promesas entregadas a Abraham su padre.
Génesis 21:1-3
Visitó Jehová a Sara, como había dicho, e hizo Jehová con Sara como había hablado. 2 Y Sara concibió y dio a Abraham un hijo en su vejez, en el tiempo que Dios le había dicho. 3 Y llamó Abraham el nombre de su hijo que le nació, que le dio a luz Sara, Isaac.
Todo esto se sujeta a una promesa entregada al patriarca.
Y apareció Jehová a Abram, y le dijo: A tu descendencia daré esta tierra. Y edificó allí un altar a Jehová, quien le había aparecido. (Génesis 12:7)
Ahí está el detalle, la tierra prometida que vendría a ser la causa del conflicto.
La desobediencia de Sarai
No hay que olvidar una cosa, que parecería insignificante en estos tiempos, pero su connotación ya la estamos viviendo, está en Génesis 16: 1-6, por si no lo leiste, te lo resumo.
Sara, antes llamada Sarai, no podía concebir y por ello persuadió a su propio marido de tomar a su sierva Agar para tener un hijo, es decir Ismael.
Por ende, esta «pequeña desobediencia” hacia Dios, desencadenó en el mayor de los conflictos que hasta ahora estamos viviendo en medio oriente.
Es decir, Sara, no le creyó a Dios de que tendría un hijo, aunque tuviera avanzada edad ¿Acaso hay algo imposible para Dios? (Génesis 18:14)
También recordemos que Abraham expulsó de su casa a Ismael y su madre Agar, porque se burlaban de su hijo Isaac.
Lo hizo por consejo de Sara su mujer y la confirmación que Dios le da, (Génesis 21:9-13).
La descendencia de Isaac
De Isaac nacería una descendencia amplia; de Isaac nacen Jacob y las 12 tribus de Israel recibiendo diferentes promesas (Génesis 49).
Sus hijos Rubén, Simeón, Leví, Judá (de la que nacería el Mesías), Dan, Neftalí, Gad, Aser, Isacar, Zabulón, José (representado por sus hijos Efraín/Manasés) y Benjamín.
Estas generaciones se encuentran esparcidas por los exilios babilónico, persa, griego y romano, que ha sufrido el pueblo hebreo durante gran parte de su vida.
Por lo tanto, los judíos pueden encontrarse en cualquier lugar debido a las múltiples persecuciones.
Una gran parte de los judíos pobló EEUU, hoy existe casi 6 millones en este país.
Otra cosa que debemos recalcar, es que Jerusalén es considerada sagrada, reflejando el conflicto religioso al albergar dentro de ella la Cúpula de la Roca y la Mezquita de Al Aqsa de los musulmanes, el Monte del Templo y el Muro de las Lamentaciones de los judíos.
¿Por qué quieren destruir a Israel?
Pese a lo descrito anteriormente, las relaciones antiguas de los dos pueblos no eran tan hostiles y se vivía en relativa paz.
Pero en 1917, el gobierno británico, a través de la Declaración de Balfour, manifestó públicamente su apoyo hacia el establecimiento de un “hogar” para el pueblo judío en la región de Palestina (la cual en ese momento formaba parte del Imperio Otomano).
De esta manera, empezaron los primeros desacuerdos en medio oriente.
Más tarde y después de la Segunda Guerra Mundial, los judíos buscaban un lugar donde pudieran reposar de la persecución nazi, que asesinó a seis millones de judíos durante el periodo del Holocausto.
La ONU atendió esta necesidad y otorgó una porción de tierra para los judíos, el 29 de Noviembre de 1947, mediante la resolución 181, dividiendo a Palestina en dos Estados, uno judío y otro árabe.
Los judíos saltaban de la emoción, mientras que los árabes rechazaban por completo dicha propuesta.
El voto, sin embargo, fue a favor de los judíos, y el 14 de mayo de 1948 se fundó el nuevo Estado de Israel.
El ataque del Líbano y la liga árabe a Israel
Un día después, el 15 de mayo, los palestinos decretaron ‘La Nakba’, la catástrofe.
A partir de entonces, 700 mil de ellos fueron obligados a desertar.
Tuvieron que buscar mejor suerte en las vecinas Gaza y Cisjordania.
Para la comunidad árabe, la constitución del Estado de Israel no era otra cosa que una intromisión.
Entonces, cinco países de la región, Líbano, Egipto, Siria, Jordania e Irak, lanzaron una ofensiva contra los recién instalados israelíes, en un territorio de cerca de 20 mil kilómetros cuadrados, con el fin de destruir Israel.
Así llegaría el primer conflicto árabe-israelí.
Pero Israel se defendió en un contraataque sin precedentes para ese entonces, doblegando a estos países y especialmente a Líbano.
Israel sobrevivió y creó las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), considerado el mejor ejército a nivel mundial, sin conocer a la fecha la derrota.
Por este ataque contra Israel y por querer destruirlo, surgieron otros conflictos con Líbano en 1968, 1973, 1978, 1982, 1985, 2000, 2006 y éste último del 2024.
La guerra de los seis días
Israel fue blanco de otro ataque en 1967 a la cabeza del presidente egipcio, Gamal Adbel Nasser, mediante un proyecto nacionalista árabe con el propósito de destruir Israel.
El conflicto duró seis días y de allí tomó el nombre de “la Guerra de los Seis Días”, una nueva derrota que sufrirían sus vecinos árabes – Egipto, Siria y Jordania – entre el 5 y el 10 de junio de 1967.
Así fue como Israel tomó el control de las tierras de Sinaí, Gaza, Golán y Cisjordania.
Después de lo ocurrido, los países árabes se reunieron en Jartum, la capital de Sudán.
Allí proclamaron que jamás negociarían ni reconocerían al Estado judío, firmando la Resolución de Jartum el 1 de septiembre de 1967, que contenía “tres no”:
No a la paz con Israel, no al reconocimiento y no a las negociaciones.
En 1978, Israel devolvió a Egipto toda la península Sinaí, un área rica en petróleo que es más grande incluso que el propio Israel, por medio de un acuerdo de paz.
Israel entregó el territorio conquistado a cambio de la paz con Egipto.
Algo similar ocurrió en el año 2000, cuando prometió territorio a los palestinos y ellos no lo aceptaron a pesar de querer concederles más del 95% de Cisjordania y todo Gaza, oferta que fue rechazada.
Es en 1982, cuando Israel ocupó Beirut con intensos ataques con el objetivo de desalojar a la Organización para la Liberación de Palestina.
En ese contexto es donde surgió el grupo libanés Hezbollah, que con apoyo de Irán, buscó ser una fuerza de resistencia a la ocupación israelí en Líbano.
Más tarde fue catalogada como organización terrorista por todos los ataques perpetrados contra Israel.
El aparecimiento de la organización terrorista Hamás
En la década de los 80´s, también apareció Hamás, una organización que controla la franja de Gaza.
Calificado como terrorista y movimiento de resistencia islámica comprometido con la destrucción de Israel, como manifiesta en su carta fundacional de 18 de agosto de 1988 mencionada anteriormente.
También rechaza los acuerdos de paz y las soluciones pacíficas por considerarlas una pérdida de tiempo e invitan a matar a los judíos.
Toma fuerza al ser la oposición a los Acuerdos de Oslo de 1993 firmados por la OLP de Yasser Arafat con Israel.
La OLP representaba a la mayoría de los palestinos.
Sin embargo, Hamás respondió en 1996 con oleadas suicidas en Israel y, por tal motivo, muchos glorificaban a los terroristas y satanizaban a Israel, acentuando su mensaje en la no existencia de Israel.
Hamás tiene aliados como Irán, Qatar, Siria, Turquía y Egipto y el grupo militante Hezbolá, calificado también de terrorista.
Hamás fue tomando fuerza política haciendo labores sociales con los palestinos y, en 2006, ganó las elecciones parlamentarias palestinas democráticamente derrotando a Mahmud Abás miembro del partido palestino Al-Fatah.
Se desató un conflicto interno que terminó debilitando a los palestinos por la lucha entre Hamás y Al-fatah, venciendo el primero.
Mahmud Abás disolvió el gobierno nacional, lo que desencadenó la división política y geográfica del territorio palestino, quedando la franja de Gaza en manos de Hamas y Cisjordania en manos de Al-Fatah
Hamás se ha dedicado a su industria guerrerista para eliminar a Israel creando túneles subterráneos para atentados terroristas que desembocan en territorio judío y lanzando misiles permanentemente, lo que Israel ha tratado de bloquear.
El Yom Kippur de 1973
Históricamente, grupos antisemitas han atacado Israel en fechas conmemorativas, con el propósito de tomar por sorpresa a los judíos.
Un caso conocido es el de la guerra de Yom Kippur, el 6 de octubre de 1973, cuando Egipto y Siria atacaron, aprovechando esta festividad religiosa solemne, que invita a Israel a pedir perdón y se encuentra en la Torah, en el libro de Levítico en el capítulo 23.
Fuente: Una lectura religiosa del Medio Oriente
El conflicto recrudece en 2023
Asimismo el 7 de octubre de 2023, volvieron a atacar dejando otra estela de dolor y muerte.
La reacción israelí no se hizo esperar y la guerra continúa hasta hoy.
Israel descabeza Hezbolá, aliado de Irán
El 28 de septiembre de 2024, Israel atacó el comando central del grupo Hezbolá en Beirut, anunciando la muerte de su líder Hassan Nasrallah.
Esto ha provocado, respuestas del Líbano mediante otros líderes de la agrupación terrorista para contrarrestar esta derrota.
El martes 1 de octubre Irán, disparó al menos 180 misiles contra Israel, algunos de los cuales impactaron en ese territorio. Es el segundo ataque iraní contra Israel este año.
La muerte de Nasrallah supone un duro golpe tanto para Hezbolá como para Irán, ya que priva a Teherán de un aliado influyente en el mundo árabe.
Más de 1.000 personas han muerto y más de 6.000 han resultado heridas como resultado de los ataques israelíes en las últimas dos semanas en Líbano.
Conclusión
El conflicto entre árabes e israelíes ha surgido desde la no compresión de las Escrituras Bíblicas, pasando por el odio, la venganza y la visión politiquera de supuestos líderes que lo único que han hecho es sembrar el desprecio y la animadversión entre pueblos que simplemente desean convivir en un estado de paz.
Las consecuencias han sido nefastas al querer destruir al Estado de Israel.
No te olvides que el verdadero Dios respalda a Israel, el que está contra Israel, no tiene buen futuro.
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