Hace 1.700 años en el sitio donde ahora es la Iglesia del Santo Sepulcro fue identificada por los romanos la tumba donde fue depositado el cuerpo de Jesús luego de la crucifixión, ahora estudiosos de este aspecto corroboran que los relatos histórico dicen la verdad.
Los estudiosos siempre se han preguntado si el sitio en la Iglesia del Santo Sepulcro de Jerusalén es la tumba de Jesucristo, es decir tenían dudas acerca de los hechos suscitados en aquel entonces.
Como se informó por primera vez por National Geographic, los resultados de las pruebas científicas proporcionadas a la revista parecen respaldar las afirmaciones de que los restos de una cueva de piedra caliza consagrada en la iglesia son parte de la tumba donde se cree que se colocó el cuerpo de Jesús.
«Está corroborando lo que los relatos históricos nos dicen», dijo Kristin Romey, editora de arqueología de National Geographic, a CBN News.
«Alrededor de 325-326 d.C., Constantine envía a su delegación a Tierra Santa para encontrar el sitio asociado con la vida y la muerte de Jesús», explicó. «De acuerdo con los relatos históricos, están preguntando por ahí, y están diciendo… ‘¿Dónde estaba la tumba de Jesucristo?'»
«Y los lugareños señalan a este templo romano; ellos derriban el templo romano, y he aquí, debajo de él hay una tumba excavada en la roca», continuó Romey.
Las cuentas históricas muestran que la tumba fue encontrada y consagrada alrededor del año 326.
National Geographic informa que los científicos tomaron muestras de mortero ubicado entre la superficie de piedra caliza original de la tumba y una losa de mármol en la parte superior que data de alrededor del año 345 d.C.
Antes de estas pruebas recientes, la evidencia arquitectónica más antigua descubierta en los alrededores del complejo de la tumba data de la época de las Cruzadas, hace alrededor de 1.000 años.
«Pero ahora, los científicos pueden confirmar que, de hecho, es el sitio identificado como el lugar de sepultura de Cristo hace 17 siglos», afirma un comunicado de prensa de National Geographic.
«Tenemos una buena cantidad de una cueva de piedra caliza con un tipo de distribución muy típica de lo que llamamos el banco funerario que aún se conserva dentro de las paredes del Edicule [el santuario que rodea la tumba]», dijo Romey a CBN News.
«Solo recuerdo estar en esa tumba y estar realmente abrumado porque este es uno de los lugares más sagrados, si no el más sagrado de la religión más grande del mundo y de ser capaz de verlo en su estado original y darse cuenta de que esta es una roca por la cual las personas han luchado y han muerto, durante siglos», compartió.
Con información de CBN / Imagen: National Geographic