En el capitulo cinco del Apocalipsis se nos habla de unos sellos, pero ¿Qué es un sello, el cual se hace mención en el este libro de la Biblia?
En el versículo 1, se habla de siete sellos que cubrían de manera segura un rollo que tenía firmemente el Cordero.
El rollo y el Cordero
1 Y vi en la mano derecha del que estaba sentado en el trono un libro escrito por dentro y por fuera, sellado con siete sellos.
¿Qué es un sello y qué clase de sello tiene este rollo?
En el tiempo de nuestro Señor Jesucristo no existía todavía la imprenta, los libros o los papeles que hoy conocemos estaban escritos en pergaminos o papiros que se enrollaban.
La palabra libro no se puede usar para esta época correctamente, la traducción, si nos vamos al hebreo es «seper» que significa rollo.
En la antigüedad para que el rollo no se mueva o se rompa le colocaban 7 sellos.
En Apocalipsis 5:1 conocemos que el rollo sellado todavía no se abrió, está en la mano del Padre.
El Padre está agarrando el rollo, hasta que llega aquel que tiene el derecho de tomarlo.
El sello era un aparato, un utensilio que servía para grabar un nombre o palabras en una sustancia blanda como la cera o como la arcilla blanda.
Los egipcios hacían en un molde que tenían todas las figuras, y sobre arcilla blanda impregnaban y ahí quedaba ya impreso los jeroglíficos.
El sello que utilizaba Jezzabel
Hay 3 partes en la Biblia donde podemos ver la importancia que tenían ciertos escritos o manuscritos que tenían un sello y una particularidad.
Por ejemplo, la primera vez utilizado en un sello real y este anillo real lo utilizaban como señal de autoridad.
La bruja, esposa del rey Acab, Jezzabel, para apropiarse de una viña, utilizó el anillo del marido para sellar un edicto para que lo pongan a este Nabot delante, blasfeme y lo acusen para apedrearle y así apoderarse de la viña.
8 Entonces ella escribió cartas en nombre de Acab, y las selló con su anillo, y las envió a los ancianos y a los principales que moraban en la ciudad con Nabot.
Estamos viendo que ella usaba el sello, era el sello real.
Generalmente los reyes tenían el sello en el anillo, ellos sellaban cualquier edicto con el mismo.
El sello con autoridad
En Génesis también encontramos un pasaje que nos habla de como fue ocupado un sello.
41 Dijo además Faraón a José: He aquí yo te he puesto sobre toda la tierra de Egipto. 42 Entonces Faraón quitó su anillo de su mano, y lo puso en la mano de José, y lo hizo vestir de ropas de lino finísimo, y puso un collar de oro en su cuello;
Otro ejemplo es lo que le dio faraón a José cuando lo nombró segundo después de él, le dio el anillo.
Ese anillo fue para sellar con la autoridad cualquier escrito, cualquier orden emitida desde la parte superior del gobierno.
Otro ejemplo: Jeremías quiso comprar una propiedad y para comprarla utilizó este sello justamente para ratificar un convenio o una compra.
10 Y escribí la carta y la sellé, y la hice certificar con testigos, y pesé el dinero en balanza.
Justamente estaba comprando una propiedad.
El sello para ratificar un convenio
Y ahora para ratificar un convenio.
44 Heredades comprarán por dinero, y harán escritura y la sellarán y pondrán testigos, en tierra de Benjamín y en los contornos de Jerusalén, y en las ciudades de Judá; y en las ciudades de las montañas, y en las ciudades de la Sefela, y en las ciudades del Neguev; porque yo haré regresar sus cautivos, dice Jehová.
Un sello para sellar puertas
La utilizaban los grandes reyes para cerrar puertas para que nadie abra.
62 Al día siguiente, que es después de la preparación, se reunieron los principales sacerdotes y los fariseos ante Pilato, 63 diciendo: Señor, nos acordamos que aquel engañador dijo, viviendo aún: Después de tres días resucitaré. 64 Manda, pues, que se asegure el sepulcro hasta el tercer día, no sea que vengan sus discípulos de noche, y lo hurten, y digan al pueblo: Resucitó de entre los muertos. Y será el postrer error peor que el primero. 65 Y Pilato les dijo: Ahí tenéis una guardia; id, aseguradlo como sabéis. 66 Entonces ellos fueron y aseguraron el sepulcro, sellando la piedra y poniendo la guardia.
Solo Jesús puede abrir esos sellos
Mi Señor Jesucristo es experto en abrir lo que la gente cierra.
En todo el reino de los cielos al único que el Padre le otorgo todo honor, toda honra, toda gloria, todo es a mi Señor Jesucristo.
12 que decían a gran voz: El Cordero que fue inmolado es digno de tomar el poder, las riquezas, la sabiduría, la fortaleza, la honra, la gloria y la alabanza.
Jesucristo es el único con la capacidad de tomar todo el poder.
18 Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra.
8 Yo soy el Alfa y la Omega, principio y fin, dice el Señor, el que es y que era y que ha de venir, el Todopoderoso.
Mi Señor es digno de recibir todas las riquezas, de tomar todas las riquezas.
8 Mía es la plata, y mío es el oro, dice Jehová de los ejércitos.
Las riquezas le pertenecen a Jesucristo
Mi Señor Jesucristo es digno de tomar la sabiduría.
16 Porque ¿quién conoció la mente del Señor? ¿Quién le instruirá? Mas nosotros tenemos la mente de Cristo.
Al que le hace falta sabiduría pídala a Dios, que el Señor le va a dar abundantemente y sin reproche.
5 Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada.
Mi Señor es digno de tomar la fortaleza
2 Jehová es mi fortaleza y mi cántico,
Y ha sido mi salvación.
Este es mi Dios, y lo alabaré;
Dios de mi padre, y lo enalteceré.
A Él puedo correr y él es mi fortaleza y mi refugio que no me deja caído y me va ayudar.
Y mi Señor Jesucristo dice que Él es el único digno en el cielo de tomar la honra.
La palabra de Dios dice en Juan 5:23 que hay que honrar a Jesucristo como se le honra al Padre:
23 para que todos honren al Hijo como honran al Padre. El que no honra al Hijo, no honra al Padre que le envió.
Mi Señor Jesucristo es digno de tomar toda la gloria.
14 Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad.
Mi Señor es digno de tomar toda la alabanza.
6 Todo lo que respira alabe a JAH.
Aleluya.
El sello es sinónimo de garantía.
1 En aquel tiempo se levantará Miguel, el gran príncipe que está de parte de los hijos de tu pueblo; y será tiempo de angustia, cual nunca fue desde que hubo gente hasta entonces; pero en aquel tiempo será libertado tu pueblo, todos los que se hallen escritos en el libro.
2 Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos para vida eterna, y otros para vergüenza y confusión perpetua.
3 Los entendidos resplandecerán como el resplandor del firmamento; y los que enseñan la justicia a la multitud, como las estrellas a perpetua eternidad.
4 Pero tú, Daniel, cierra las palabras y sella el libro hasta el tiempo del fin. Muchos correrán de aquí para allá, y la ciencia se aumentará.
5 Y yo Daniel miré, y he aquí otros dos que estaban en pie, el uno a este lado del río, y el otro al otro lado del río.
6 Y dijo uno al varón vestido de lino, que estaba sobre las aguas del río: ¿Cuándo será el fin de estas maravillas?
7 Y oí al varón vestido de lino, que estaba sobre las aguas del río, el cual alzó su diestra y su siniestra al cielo, y juró por el que vive por los siglos, que será por tiempo, tiempos, y la mitad de un tiempo. Y cuando se acabe la dispersión del poder del pueblo santo, todas estas cosas serán cumplidas.
8 Y yo oí, mas no entendí. Y dije: Señor mío, ¿cuál será el fin de estas cosas?
9 Él respondió: Anda, Daniel, pues estas palabras están cerradas y selladas hasta el tiempo del fin.
10 Muchos serán limpios, y emblanquecidos y purificados; los impíos procederán impíamente, y ninguno de los impíos entenderá, pero los entendidos comprenderán.
Esta relación que estamos haciendo tiene que ver con algo que estaba sellado para un tiempo determinado, generaciones tras generaciones, cientos de años pasaron y no había ningún acontecimiento que permitiera que ese libro de Daniel, el cual ordenado por este príncipe, este ángel de Jehová, se abriera.
Daniel y su fiel obediencia
Daniel pudo escribir, sellar y cerrar, pero no pudo abrir.
Juan conocedor de la bendita escritura, conocedor del sello y cierre del libro de Daniel, lloraba al ver que no había quien pudiera abrir este libro, son 7 sellos.
Estos 7 sellos eran la garantía de la inviolabilidad del contenido de la profecía.
¿Quién tenía el derecho de abrir esos sellos?
Para el Cordero Inmolado, porque Él fue y Él es el testimonio, de Él es el espíritu de la profecía, a Él está dirigido todo, a Él la gloria, la honra, la sabiduría y el poder y alabanza.
4 Y lloraba yo mucho, porque no se había hallado a ninguno digno de abrir el libro, ni de leerlo, ni de mirarlo.
Jeremías es conocido como el profeta llorón, pero Juan lloraba mucho en ese entonces, pero sus lágrimas tenían un propósito.
Si no se abría el Libro, si no se abrían los sellos no vendrían los juicios de Dios y todo quedaría como está y la tierra sería perdida eternamente.
Lloraba Juan diciendo, que ya no puede más. «Acorta los tiempos a causa de tus escogidos Padre, ya no podemos ver el homosexualismo, la perversión que hay, es que es terrible», sollozaba.
Su llanto se centraba en que no es posible que el Libro se quede así, se tiene que abrir, los sellos se tienen que desatar.
¿Por qué Jesús es digno de abiri los sellos?
Él es el creador de todas las cosas, Él es uno con el Padre, Él merece toda honra, todo honor y toda gloria, pero lo que le hace digno de recibir todo reconocimiento, todo poder, todo lo podemos ver en:
3 Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo;
4 no mirando cada uno por lo suyo propio, sino cada cual también por lo de los otros.
5 Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús,
6 el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse,
7 sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres;
8 y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.
9 Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre,
10 para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra;
11 y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.
Nuestro Señor es digno, porque siendo Dios se hizo hombre, siendo hombre se humilló, siendo humilde lo masacraron entregándose voluntariamente por nuestra maldad, muriendo en la Cruz del Calvario de una forma horrorosa.
Él es digno, porque fue destrozado llevando nuestra culpa, nuestra vergüenza, por eso cuando resucita venciendo a la muerte Dios Padre le entrega todo al Hijo y Él es el único digno de recibir todo honor, toda honra y toda gloria y mi Señor no comparte su Gloria con nadie, como dice Isaías 42:8
8 Yo Jehová; este es mi nombre; y a otro no daré mi gloria, ni mi alabanza a esculturas.
Y su gloria no la comparte con ídolos. Si Él es el único digno la Palabra nos obliga a nosotros a vivir en dignidad como nuestro maestro.
5 Y uno de los ancianos me dijo: No llores. He aquí que el León de la tribu de Judá, la raíz de David, ha vencido para abrir el libro y desatar sus siete sellos.
Cuando entró a las puertas de la ciudad de Naim venía una viuda con su hijo que había muerto, ya no era suficiente que el marido había muerto y ahora el hijo; la mujer quedó completamente sola y desecha.
Nadie la consolaba. Entonces aparece Jesús, se le acerca y le dice: «mujer no llores». ¿Te imaginas lo maravilloso que deben haber sido esas palabras en boca del Maestro?
Y este anciano que hablaba el mismo lenguaje del reino de los cielos le dice Juan no llores; nos dice a ti y a mi, no llores, que lo que hay aquí adentro, este contenido de juicio y castigo no es para ti que has creído en mí.
Y los sellos fueron abiertos
Y dijo la palabra del Dios bendito “he aquí”:
1 El León de la tribu de Judá
2 La raíz de David
3 Ha vencido el propósito para abrir el libro y desatar sus siete sellos.
Este evento se desarrolla en medio de una situación impactante.
6 Y miré, y vi que en medio del trono y de los cuatro seres vivientes, y en medio de los ancianos, estaba en pie un Cordero como inmolado, que tenía siete cuernos, y siete ojos, los cuales son los siete espíritus de Dios enviados por toda la tierra.
En Isaías 11 se explica esto.
7 Y vino, y tomó el libro de la mano derecha del que estaba sentado en el trono. 8 Y cuando hubo tomado el libro, los cuatro seres vivientes y los veinticuatro ancianos se postraron delante del Cordero; todos tenían arpas, y copas de oro llenas de incienso, que son las oraciones de los santos;
Al decir tenían arpas, es alabanza, adoración.
Copas de oro, el oro le pertenece al Señor.
Las copas estaban llenas de nuestras oraciones.
Este es el momento en que está aconteciendo lo que tenía que acontecer y lo que Daniel no pudo ver, solo pudo escribir y pudo cerrar y pudo sellar.
Pero hoy está ocurriendo lo que el Cordero pudo abrir y está empezando a liberar cada sello.
Las copas llenas de nuestras oraciones; pensaste que nunca serían escuchadas, pues te equivocas. La copa se estaba llenando de incienso, sigue orando que la copa de oro está llena de tus oraciones y de todos los santos en el mundo.
Entonces tomó el libro, el Hijo se acerca al Padre y éste le entrega el rollo; y cuando hubo tomado el rollo los seres vivientes se postraron ante el Cordero que quita el pecado del mundo, ante el Hijo de Dios.
Y lo colocó sobre la mesa en la sinagoga donde se extiende el rollo, pero para poder abrirlo tubo que romper el primer sello, el primer candado, el primer broche lo despegó.
9 y cantaban un nuevo cántico, diciendo: Digno eres de tomar el libro y de abrir sus sellos; porque tú fuiste inmolado, y con tu sangre nos has redimido para Dios, de todo linaje y lengua y pueblo y nación;
10 y nos has hecho para nuestro Dios reyes y sacerdotes, y reinaremos sobre la tierra.
Esto significa que Jesús ha pagado un precio por mí, quiere decir que yo poseo un valor, y no para cualquier persona sino para el Cordero inmolado, aquel que fue hallado digno de abrir los sellos.
Efectivamente, tu vales tanto que pagó Él a precio de sangre por tu redención y nos ha hecho para nuestro Dios reyes y sacerdotes y reinaremos sobre la tierra.
Con la obediencia viene la Bendición y la Salvación
1 Acontecerá que si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, para guardar y poner por obra todos sus mandamientos que yo te prescribo hoy, también Jehová tu Dios te exaltará sobre todas las naciones de la tierra.
2 Y vendrán sobre ti todas estas bendiciones, y te alcanzarán, si oyeres la voz de Jehová tu Dios.
Porque la bendición de Dios es la que enriquece y no añade tristeza con ella.
Si yo obedezco las bendiciones van alcanzarme.
Con los sellos del apocalipsis, comienza la primera fase de los juicios de Dios.
Ahora, si no has aceptado aún a nuestro Señor Jesucristo en tu corazón, te invito hacerlo ahora ¡Qué estas esperando!
Solo has esta pequeña oración: Señor te pido perdón por todo el dolor que he causado en Ti con mi pecado, te ruego que reines en mi corazón y en mi vida, que camines todos los días conmigo, te amo Señor Jesús, te lo pido en el nombre poderoso de Cristo Jesús, amén.
