El líder de Corea del Norte Kim Jong-un y el presidente de EEUU, Donald Trump, firmaron este martes un acuerdo “muy amplio” en el marco de la cumbre en Singapur. Kim señaló que “el mundo verá un cambio muy grande” y que ambos líderes han «dejado atrás el pasado».
No se difundió el contenido del documento pero gracias a un insólito descuido, el magnate estadounidense lo mostró ante las cámaras y los fotógrafos presentes capturaron su contenido.
En los cuatro puntos que conforman el escrito, ambos países se comprometen a establecer nuevas relaciones de acuerdo con el deseo de paz y prosperidad de los dos países, Corea del Norte reafirma su «firme e inquebrantable» compromiso con la completa desnuclearización de la península y Estados Unidos se compromete a garantizar la seguridad del régimen.
Washington y Pyongyang prometieron además que recuperarán los restos de los prisioneros de Guerra y de los desaparecidos en combate durante la Guerra de Corea.
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El documento también establece que el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, se reunirá en «la fecha más temprana posible» con un alto funcionario norcoreano para continuar el diálogo bilateral sobre la desnuclearización.
El presidente estadounidense prometió además que invitará a Kim a visitarlo en la Casa Blanca. Tras la firma, un periodista le preguntó si pensaba invitarlo, a lo que respondió: “Por supuesto, lo haré”.
Luego de la firma del documento en un salón, ambos líderes fueron a la misma escalinata donde se habían dado la mano inicialmente. Allí se despidieron, entre sonrisas, mucho más relajados que por la mañana, cuando se habían conocido.
Días antes multitudes se reunieron en el centro de Seúl para participar en una vigilia de oración por una cumbre exitosa entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump y el líder norcoreano Kim Jong Un.
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Miembros de diversos grupos cívicos y religiosos, junto con otros activistas, se reunieron en la Plaza Gwanghwamun para orar por la paz y el éxito de la cumbre.
«La cumbre entre Estados Unidos y Corea del Norte es realmente histórica. Desde esta cumbre, creo que todas las personas de esta nación esperan y desean el final de la guerra en la península de Corea, la normalización de las relaciones diplomáticas entre Corea del Norte y Estados Unidos, y un mundo sin guerra», dijo Hwang Yun-mi, una participante del evento que se realizó el día sábado.
Con información de: EL Clarín / Mundo Cristiano