Durante años hemos escuchado de experiencias «sobrenaturales» sobre la vida después de la muerte, tema que aún sigue siendo controversial para quienes no creen en Dios.
No obstante, el hecho de que varias personas en el mundo no crean en la existencia de Dios, no significa que no es real.
Un nuevo caso aparece desde la Fundación para la Investigación de Experiencias Cercanas a la Muerte, el mayor sitio web de experiencias cercanas a la muerte en el mundo. Y es que Charles, mostró de forma detallada la experiencia que hizo que su vida cambiara.
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Tenía una visión del cielo después de sufrir un ataque al corazón y pasar dos procesos de reanimación. Él dijo que estaba técnicamente muerto cuando tuvo una visión de Jesús y los ángeles. “Cuando morí, entré en el cielo. Yo no podía quitar los ojos de lo que yo veía. Los ángeles me llevaban debajo de cada brazo, uno a mi izquierda y otro en mi brazo derecho”, relata.
“Yo estaba consciente de su presencia, pero no podía quitar los ojos de lo que estaba delante de mí. Yo vi una pared formada por las más blancas nubes con una luz emanando de ellas. Yo sabía lo que estaba detrás de esas nubes y cuál era la fuente de esa luz. Sabía que era Jesús”, añade.
«Vi a Jesús montado en el caballo blanco más hermoso que he visto. Llegamos más cerca, Él nos miró, extendió la mano izquierda y dijo: “No es su hora”, señaló Charles.
En ese instante, Charles cuenta que fue transportado de vuelta a su cuerpo por los ángeles, pero se vio nuevamente entre la vida y la muerte.
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“Fue casi una copia de la primera experiencia. Estábamos viajando por el espacio a una velocidad increíble. Las estrellas parecían líneas pasando por nosotros. La única cosa diferente fue cuando Jesús extendió la mano. Esta vez, Él dijo: ‘Yo dije que su hora aún no ha llegado’. Me sentía en apuros por haber vuelto tan temprano “, recuerda.
Mientras Charles estaba teniendo esta impactante experiencia con Dios, él podía ver a su esposa, que sentía de alguna forma que algo estaba mal con él. “Ella se puso de rodillas y oró por mí como si nunca hubiera orado por mí antes”, cuenta Charles. Su esposa llamó al teléfono del trabajo de Charles para saber si estaba bien y se enteró que él había sufrido un grave ataque al corazón y tuvo que pasar por una cirugía de emergencia, pero que gracias a Dios, se realizó con éxito.
Fuente: BibliaTodo
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